¿Qué influyó para que México perdiera la categoría 1 en seguridad aérea?
La AFAC perdió la categoría 1 en seguridad aérea por incumplir con los anexos de seguridad aérea establecidos por la Organización de Aviación Civil Internacional (OACI). Después de una auditoría en 2021, la FAA encontró que la estructura de vigilancia de la autoridad mexicana era deficiente, además que las leyes nacionales no establecían, con claridad, las atribuciones de la propia Agencia.
Según el programa IASA, la FAA evalúa a las autoridades de aviación civil de todos los países con compañías aéreas que han solicitado volar a los Estados Unidos, que actualmente realizan operaciones a los Estados Unidos o participan en acuerdos de código compartido con aerolíneas estadounidenses. Las evaluaciones determinan si las autoridades de aviación civil internacional cumplen con los estándares mínimos de seguridad de la OACI, no con las regulaciones de la FAA.
Para obtener y mantener una calificación de Categoría 1, un país debe cumplir con los estándares de seguridad de la OACI, la cual establece normas internacionales y prácticas recomendadas para las operaciones y el mantenimiento de aeronaves.
En la primera auditoría que llevó a cabo la FAA se encontraron 28 hallazgos de no cumplimiento, los cuales ocasionaron que la autoridad mexicana fuera degradada a categoría 2, una posición que afectó a las aerolíneas mexicanas durante la pandemia y que les impidió abrir nuevas rutas hacia Estados Unidos durante más de dos años.
Al menos 100 de las principales aerolíneas mexicanas también estuvieron impedidas para operar sus aeronaves en vuelos desde y hacia Estados Unidos, una situación que restó rentabilidad a las empresas en un momento de fuerte presión financiera.
Aunque el gobierno tuvo múltiples prórrogas en la recuperación de la categoría, siempre aseguró que cumplía con los requerimientos de la FAA; no obstante, información obtenida por El Financiero de la última auditoría, concluida el 2 de junio de este año, mostraba que la FAA aún tenía dudas en dos aspectos: medicina de aviación e investigación de accidentes e incidentes.
Ambos elementos, cruciales para la seguridad aérea, fueron enmendados por correcciones en el Diario Oficial de la Federación (DOF) a inicios de esta misma semana.